Aunque es cierto que el 99% de las criptomonedas existentes carecen de valor y respaldo, algunas destacan por tener fundamentos sólidos que se alinean con la estrategia de inversión de BlockCapital. A pesar de la ausencia de respaldo tangible, estas criptomonedas ofrecen robustos fundamentos tecnológicos y económicos, respaldados por casos de uso reales y una creciente adopción.
Un claro ejemplo de esto es la comparación entre el valor del oro y Bitcoin. Si bien el oro se apoya en su escasez absoluta y oferta limitada, Bitcoin presenta una escasez aún mayor y una oferta predecible debido a su límite máximo de 21 millones de unidades. Además, Bitcoin es altamente divisible y su naturaleza digital lo hace más portátil que el oro. La confianza y seguridad que ofrece Bitcoin, respaldada por su tecnología blockchain descentralizada, supera incluso la seguridad percibida en el oro, que puede depender de intermediarios.
Por otro lado, Ethereum y otras criptomonedas representan proyectos innovadores con un potencial disruptivo en la economía digital. Ethereum, en particular, permite la ejecución de contratos inteligentes y el desarrollo de aplicaciones descentralizadas, lo que impulsa su adopción y demanda. La transparencia y descentralización inherentes a las criptomonedas ofrecen una mayor confianza y seguridad a los inversores, lo que las convierte en opciones atractivas de inversión.
En BlockCapital, la estrategia se centra en invertir en criptomonedas respaldadas por tecnología blockchain sólida. Se presta especial atención a tres aspectos clave: infraestructura para la Web 3.0, eficiencia y capacidad de transacciones, interoperabilidad y conectividad entre blockchains. Estas criptomonedas no solo representan el futuro de la economía digital, sino que también tienen el potencial de ofrecer retornos significativos a los inversores que las apoyan desde etapas tempranas.
En resumen, aunque la mayoría de las criptomonedas carecen de respaldo, aquellas que cumplen con los criterios de inversión de BlockCapital están respaldadas por proyectos sólidos y fundamentales que representan la infraestructura necesaria para la evolución de la economía digital. Esta comprensión más profunda del respaldo y el potencial de las criptomonedas abre nuevas oportunidades para los inversores que buscan diversificar sus carteras y capitalizar el crecimiento en el espacio de las criptomonedas.